Los pueblos indígenas de Abya Yala descubren a Europa

Isla Guanahaní, Caribe, 12 de octubre de 1492 – Hoy, en una fecha que cambiará la historia, los pueblos indígenas de Abya Yala han hecho un descubrimiento inesperado: la llegada de extranjeros provenientes de tierras lejanas. Este encuentro, que tuvo lugar en la isla Guanahaní, habitada por los taínos, marca el inicio de lo que muchos describen como el "descubrimiento de Europa" por los pueblos originarios del continente.

Grandes embarcaciones comandadas por un hombre llamado Cristóbal Colón llegaron a las costas del Caribe. Aunque inicialmente pacíficos, estos recién llegados trajeron consigo tecnologías y costumbres desconocidas para los habitantes locales. "Nos encontramos con seres extraños que visten ropas extrañas y portan objetos que nunca habíamos visto", reportó un cacique taíno en uno de los primeros relatos sobre el encuentro. Sin embargo, los líderes indígenas pronto notaron que no solo traían consigo novedades tecnológicas, sino que también portaban la espada y la cruz, símbolos que presagiaban no solo intercambio, sino también dominación y conversión forzada.

A medida que la noticia del "descubrimiento" se propaga, grandes civilizaciones de Abya Yala, como los mexicas, incas y mayas, han comenzado a evaluar las posibles implicaciones del contacto con estos extranjeros. En la ciudad de Cuzco, el Inca Huayna Cápac ha convocado a una reunión de emergencia con sus asesores para discutir la mejor manera de enfrentar esta nueva situación.

Mientras tanto, desde la poderosa Tenochtitlán, el Tlatoani Moctezuma II ha expresado su preocupación sobre las verdaderas intenciones de estos europeos. "Hemos sido testigos de muchas civilizaciones, pero ninguna tan extraña como esta. Observaremos cuidadosamente sus movimientos", dijo en un comunicado a sus consejeros.

Aunque el contacto inicial ha sido pacífico, los líderes indígenas no descartan la posibilidad de que estos forasteros traigan consigo intenciones hostiles. Ya se han comenzado a organizar estrategias de defensa en diversas regiones del continente. En las costas del Caribe, los taínos han reforzado su vigilancia, mientras que en el interior del continente se discute cómo preservar las tradiciones y territorios frente a esta posible amenaza.

“Este es un momento crucial para nuestras naciones. Hemos descubierto una nueva civilización, pero no debemos bajar la guardia. Aprenderemos lo que podamos, pero defenderemos nuestra tierra y nuestra cultura”, afirmó el consejo de ancianos mayas en Yucatán.

El futuro de Abya Yala y Europa

Aunque el impacto de este descubrimiento aún no está claro, los pueblos de Abya Yala están decididos a no ser pasivos ante la llegada de los europeos. A lo largo del continente, se están reforzando alianzas entre las distintas naciones indígenas para afrontar cualquier desafío que estos recién llegados pudieran presentar. Las próximas semanas y meses serán decisivos para entender el impacto total de este "descubrimiento de Europa" y cómo las naciones indígenas responderán a este inesperado encuentro.